Hoy te traigo una receta infalible: bastones de calabacín con queso crujientes, hechos en la AirFryer. Sí, he caído en la tentación de la famosa freidora de aire. Llevo meses viéndola en un montón de sitios y no me animaba a comprarla. Tengo mil cacharros (robot de cocina, licuadora, heladera…) diferentes, porque me flipan, pero ocupan un montón de espacio y, tristemente, no soy Arguiñano con su cocina enorme.
Además había gente que me decía cosas como “si es como un horno“, “lo que puedes hacer ahí lo haces en el horno mucho más fácil“. Y es un sí, pero no. Efectivamente, casi todas las cosas puedes hacerlas también en el horno, pero no vale para lo mismo. El resultado que se consigue no es igual. La AirFryer, como su nombre indica, es una freidora y, por tanto, el resultado es súper crujiente pero sin usar nada de aceite. Una maravilla. Y esto en el horno no lo consigues, te pongas como te pongas (aunque también queden buenísimos).
Lo mejor de esta receta es que es bastante sana (no dejan de ser bastones de calabacín) pero el queso mozzarella, los cereales y la AirFryer le dan el toque sabroso y crunchy que evitan que sea aburrida. Me recuerdan un poco a los palitos de pollo con Corn Flakes que estuvieron tan de moda hace una temporada. Además se pueden comer como aperitivo o como acompañamiento de una hamburguesa, un pescado, una carne… En vez de meterle la clásica patata, le das un aire molón y diferente al plato. ¿Te animas a probarlos?
Si no tienes AirFryer o, simplemente, no te apetece encenderla. Te dejo la opción horno también en las instrucciones de la receta.